Riesgos de no realizar el Mantenimiento y Calibración de mi equipo de laboratorio
- Claudia Hernández
- 20 oct
- 2 Min. de lectura
No dar mantenimiento y Calibración a un instrumento de laboratorio implica una serie de riesgos técnicos, económicos y de seguridad que pueden afectar tanto los resultados analíticos como la operación general del laboratorio. A continuación, un resumen por categorías:
Falta de Mantenimiento
Riesgos técnicos
Fallas en el funcionamiento: los componentes se desgastan o desajustan, provocando errores en la medición o la imposibilidad de operar el equipo.
Pérdida de calibración: la precisión y exactitud disminuyen, afectando la validez de los datos.
Contaminación cruzada: residuos o acumulación de muestras alteran los resultados de análisis posteriores.
Mayor tiempo de inactividad: el equipo requiere reparaciones más largas y frecuentes.
Riesgos económicos
Costos de reparación elevados: las fallas acumuladas suelen ser más caras que un mantenimiento preventivo.
Pérdida de productividad: interrupciones en los procesos analíticos o retrasos en la entrega de resultados.
Desgaste prematuro: disminuye la vida útil del instrumento, requiriendo una sustitución anticipada.
Riesgos de calidad
Datos no confiables: errores en los resultados comprometen estudios, certificaciones o controles de calidad.
No conformidades en auditorías: incumplimiento de normas como ISO 17025, GLP o GMP.
Reprocesos y desperdicio: necesidad de repetir pruebas, aumentando consumo de reactivos y tiempo.
Riesgos de seguridad
Accidentes o fugas: componentes deteriorados pueden liberar gases, líquidos o radiación.
Riesgo eléctrico o térmico: sobrecalentamiento o cortocircuitos por falta de revisión.
Condiciones insalubres: acumulación de residuos, hongos o vapores en equipos sin limpieza.
Por ejemplo, un Espectrofotómetro puede presentar pérdida de sensibilidad, lámparas fundidas, lecturas erráticas o un Cromatógrafo de gases puede presentar fugas de gas que puede ser peligroso y caro, picos deformados, pérdida total de señal o daño al detector.
Falta de Calibración
Riesgos técnicos
Desviaciones en las mediciones: el equipo puede arrojar resultados incorrectos sin que el operador lo note.
Incertidumbre no controlada: se pierde la trazabilidad metrológica frente a patrones certificados.
Desalineación interna o electrónica: los sensores, detectores o sistemas ópticos dejan de trabajar en su rango óptimo.
Incompatibilidad entre equipos: los datos obtenidos con diferentes instrumentos ya no son comparables entre sí.
Riesgos en la calidad de los resultados
Resultados no confiables: análisis, ensayos o mediciones pueden ser rechazados por clientes o auditores.
Falsos positivos o negativos: errores que afectan decisiones críticas (por ejemplo, liberación de producto o rechazo de materia prima).
Reprocesos o pérdida de muestras: se deben repetir ensayos, generando desperdicio de recursos.
Pérdida de acreditaciones: incumplimiento de normas como ISO 17025, GLP o GMP.
Riesgos económicos
Costos por reprocesos o sanciones: los errores derivados de instrumentos no calibrados pueden afectar contratos o auditorías externas.
Desperdicio de materiales y tiempo: repetir pruebas o corregir errores eleva los costos operativos.
Daños a la reputación del laboratorio: pérdida de confianza de clientes o entes reguladores.
Riesgos de seguridad
Mal funcionamiento del equipo: en instrumentos con presión, temperatura o gases, una calibración incorrecta puede causar accidentes.
Decisiones erróneas: en procesos industriales o clínicos, una medición incorrecta puede tener consecuencias graves para la salud o el entorno.
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